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audiencia con el rey de los mares
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audiencia con el rey de los mares
Lugar: Costa.
No hacía falta ver el rostro de Triton para ver su estado de ánimo.
El mar azotaba con fuerza la costa, embistiendo contra los tambaleantes barcos que volvían a puerto sorprendidos por el brusco cambio de tiempo.
El mar no sólo estaba furioso, el cielo se había ocultado bajo unos terribles nubarrones oscuros que parecía que la noche se había adelantado, pero iluminado por algún rayo,
A pesar de todo, el gesto del señor de los mares era neutro cuando asomó a la superficie, miro a la tierra, como si dudase de subir el mismo o enviar una ola que la hundiese...
El no podía tomar tierra, era un echo que su castigo, ya fuera propio o de la bruja, no podía ser roto.
Y naturalmente no podía hundir la tierra sin saber en que condición estaba su hija... Ariel....
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
Hace unas horas que Franz había llegado a Marshovia. Su visita era meramente de cortesía, buscando información importante para su búsqueda. ¿Qué búsqueda? La carta hombre… la maldita carta.
Por desgracia no ha tenido mucho éxito. La gente parece haberse olvidado de la joven doncella que, años atrás, había tomado por amante y no tenía forma de saber dónde se había mudado. Y sin ella, ¿cómo encontraría dicha información? Callejones sin salida, eso tenía.
Intentando mantenerse tranquilo decidió dar una pequeña vuelta por la costa, pues la visión del tranquilo mar de Marshovia siempre había calmado sus ánimos. Eso y el ron. Nada mejor que el ron para pasar la pena. Con ambos ante sus ojos hasta llegó a pensar en si pasaba la noche entre la arena cálida, cuando sintió el escandalo: La tormenta del siglo. Listo, se acabó, el fin del mundo se acerca…
De todas formas no confiaba especialmente en su cerebro ahora, después de beber un poco, pero estaba muy seguro que no estaba borracho. Por eso dudó el doble al ver una figura asomarse entre las olas, una visión majestuosa que, en alguna otra ocasión, habría asociado con el mismísimo Poseidón. Estando así, pensaba que el ron y el viaje habían hecho estragos, con lo que tenía una alucinación. No sería la primera vez. A veces veía a una jovencita de cabellos negros como la noche y labios rojos como la sangre, sonriéndole frente a la mesa. ¿¡Y quién diantres ve algo tan poético estando borracho!?
–Alabado sean los espíritus del bosque, ¡está es mi señal! Juro que dejaré de beber ron antes de comer algo, pues ya está afectando mi visión. – dijo entre risas, prefería tomarse el asunto con un poco de humor. –Está ante mis ojos el señor de los mares en persona. ¿Viene a reclamarme por ensuciar sus aguas durante mi infancia?
No tenía idea de qué aspecto tenía, puesto que el viaje había sido largo y agotador, pero estaba seguro que no podía estar más patético. Hablando solo, a una imagen creada por su cabeza, riéndose por culpa del alcohol y un poco de desesperación.
Por desgracia no ha tenido mucho éxito. La gente parece haberse olvidado de la joven doncella que, años atrás, había tomado por amante y no tenía forma de saber dónde se había mudado. Y sin ella, ¿cómo encontraría dicha información? Callejones sin salida, eso tenía.
Intentando mantenerse tranquilo decidió dar una pequeña vuelta por la costa, pues la visión del tranquilo mar de Marshovia siempre había calmado sus ánimos. Eso y el ron. Nada mejor que el ron para pasar la pena. Con ambos ante sus ojos hasta llegó a pensar en si pasaba la noche entre la arena cálida, cuando sintió el escandalo: La tormenta del siglo. Listo, se acabó, el fin del mundo se acerca…
De todas formas no confiaba especialmente en su cerebro ahora, después de beber un poco, pero estaba muy seguro que no estaba borracho. Por eso dudó el doble al ver una figura asomarse entre las olas, una visión majestuosa que, en alguna otra ocasión, habría asociado con el mismísimo Poseidón. Estando así, pensaba que el ron y el viaje habían hecho estragos, con lo que tenía una alucinación. No sería la primera vez. A veces veía a una jovencita de cabellos negros como la noche y labios rojos como la sangre, sonriéndole frente a la mesa. ¿¡Y quién diantres ve algo tan poético estando borracho!?
–Alabado sean los espíritus del bosque, ¡está es mi señal! Juro que dejaré de beber ron antes de comer algo, pues ya está afectando mi visión. – dijo entre risas, prefería tomarse el asunto con un poco de humor. –Está ante mis ojos el señor de los mares en persona. ¿Viene a reclamarme por ensuciar sus aguas durante mi infancia?
No tenía idea de qué aspecto tenía, puesto que el viaje había sido largo y agotador, pero estaba seguro que no podía estar más patético. Hablando solo, a una imagen creada por su cabeza, riéndose por culpa del alcohol y un poco de desesperación.
Off: Me ha salido muy extraño, y tal vez algo ofensivo tomando en cuenta el animo del rey de los mares, pero no pude evitarlo. Franz está tan cansado que un poco de alcohol pudo perfectamente dejarlo así.
Re: audiencia con el rey de los mares
Off: mil perdones, no esperaba quw nafie respondiese xD
On:
Triton reparo entonces en el hombre que parecía hablarle, sus oídos apenas habían captado sus palabras pues estas estaban sordas por el ruido de una tormenta que sólo el podía oír, pues bullia en su interior.
Triton se volvió hacía el mortal y le dijo:
-Tu! Joven, tengo algo que pedirte.
Triton hablaba con autoridad aún sin saber a quien hablaba, pero viendo su aspecto y su estado, no vio la necesecidad de tomarse libertad de preguntarlo.
-Necesito de tu ayuda para encontrar a una persona...
On:
Triton reparo entonces en el hombre que parecía hablarle, sus oídos apenas habían captado sus palabras pues estas estaban sordas por el ruido de una tormenta que sólo el podía oír, pues bullia en su interior.
Triton se volvió hacía el mortal y le dijo:
-Tu! Joven, tengo algo que pedirte.
Triton hablaba con autoridad aún sin saber a quien hablaba, pero viendo su aspecto y su estado, no vio la necesecidad de tomarse libertad de preguntarlo.
-Necesito de tu ayuda para encontrar a una persona...
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
Off: No hay drama
On: ¿Eh? ¿Desde cuándo una voz de su cabeza le respondía? Y aun peor, ¡Le mandaba! De todas formas, mira a su alrededor, buscando a alguien más, porque aun duda de que un anciano se capaz de hablarle de esa forma a él. ¡A él! El hijo de los reyes de Lindert, heredero de la corona y objeto de deseo de la extraña y tétrica reina del otro reino… No, mala idea irse por ese camino. Mejor prestemos atención al viejo. Que estaba entretenido de todas formas.
–No es el único que está buscando a alguien, anciano. – dice, acariciando una imaginaria barba. –Y no sé por qué debería hacer algo por una simple ilusión de mi mente.
Que Franz es un hombre muy ocupado. Tal vez no con cosas del reino, pero la malditaeinnombrablecarta ocupaba todo el espacio. Por mucho que esa barba blanca tan larga le causara respeto.
–Por lo demás, siquiera soy de este reino, debería saberlo.
Porque era todo un tema de borrachera, nada más. De todas formas, algo no le huele muy bien en esa ilusión. Apesta demasiado a pescado…
On: ¿Eh? ¿Desde cuándo una voz de su cabeza le respondía? Y aun peor, ¡Le mandaba! De todas formas, mira a su alrededor, buscando a alguien más, porque aun duda de que un anciano se capaz de hablarle de esa forma a él. ¡A él! El hijo de los reyes de Lindert, heredero de la corona y objeto de deseo de la extraña y tétrica reina del otro reino… No, mala idea irse por ese camino. Mejor prestemos atención al viejo. Que estaba entretenido de todas formas.
–No es el único que está buscando a alguien, anciano. – dice, acariciando una imaginaria barba. –Y no sé por qué debería hacer algo por una simple ilusión de mi mente.
Que Franz es un hombre muy ocupado. Tal vez no con cosas del reino, pero la malditaeinnombrablecarta ocupaba todo el espacio. Por mucho que esa barba blanca tan larga le causara respeto.
–Por lo demás, siquiera soy de este reino, debería saberlo.
Porque era todo un tema de borrachera, nada más. De todas formas, algo no le huele muy bien en esa ilusión. Apesta demasiado a pescado…
Re: audiencia con el rey de los mares
Triton no respondió de inmediato, lo miro con el ceño fruncido un rato mientras las olas abatieron con más fuerza la costa, a peaar de ello no lo movieron del sitio, permanecía inmóvil como una estatua.
Cuando se calmó el oleaje, o este se calmó con su temperamento respondió
-quien busca una persona. .. Puede encontrar a 2 ¿no cree?
Esa lógica parecía de lo más aplastante, sobretodo cuando alzó el tridente brillando
-Yo tampoco soy de este reino, por si no lo había notado, pero no tengo más remedio que confiar en usted... Parece alguien de confianza...
Aunque triton hablaba serio este lado la cabeza antes de decir
-Exeptuando su adicción a la botella... Claro.... Habrá que hacer algo con eso
Triton mostró algo que podía parecer una sonrisa o una mueca de sarcasmo
-Busques a quien busques, no se encuentra al fondo de una botella.
Cuando se calmó el oleaje, o este se calmó con su temperamento respondió
-quien busca una persona. .. Puede encontrar a 2 ¿no cree?
Esa lógica parecía de lo más aplastante, sobretodo cuando alzó el tridente brillando
-Yo tampoco soy de este reino, por si no lo había notado, pero no tengo más remedio que confiar en usted... Parece alguien de confianza...
Aunque triton hablaba serio este lado la cabeza antes de decir
-Exeptuando su adicción a la botella... Claro.... Habrá que hacer algo con eso
Triton mostró algo que podía parecer una sonrisa o una mueca de sarcasmo
-Busques a quien busques, no se encuentra al fondo de una botella.
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
Oh. Aunque despacio, el cerebro de Franz parece reaccionar entre las nubes de la borrachera, reconociendo que el que estaba frente a si no era exactamente producto de un delirio. Se veía bastante más real. Y al parecer, su primera impresión fue exacta. Era una especie de mini Poseidón.
–Por las ninfas, eres de verdad…
Franz, estás en muchos, muchos problemas.
-quien busca una persona. .. Puede encontrar a 2 ¿no cree?
–O tal vez no encuentre a ninguna solo por intentar encontrar a ambas. Nunca se sabe.
Era una lógica aún más aplastante, pero Franz no pensaba encontrar a una, así que en realidad no importa demasiado. Seguramente el hombre descubriese que él no es el más indicado para esos trabajos.
Traga un poco de saliva al notar el tridente. Es que eso cambia todo el doble. Hasta él sabe que eso solo lo lleva un rey de los mares, que el maestro tuvo la amabilidad de contarle leyendas de los mares y Franz está lo bastante maduro para reconocer que, en medio de tanta leyenda, hay una que otra verdad.
–Confiar en un extraño no parece algo propio de un rey, si me permite decirlo… ¿Quién es la persona por la que estaría dispuesto a correr el riesgo?
Sonríe al pensar en esa supuesta adicción. Que no, no era taaan adicto. Es solo para pasar las penas. Y cuando tenía alguna misión, se mantenía lejos de cualquier bebida alcohólica.
–La verdad, conociéndola, lo más seguro es que esté dentro de una botella. – dice, más para sí que para él. Brujas todas, esa más que ninguna. –Pero no se preocupe, su alteza, – ante estas palabras, hace una pequeña reverencia, más bien burlesca. –esta noche por ser especial he bebido más de la cuenta. Normalmente soy bastante más despierto.
Franz, para apoyar sus palabras de que aún no es un adicto, saca de entre su ropa la botella medio vacía, dejando caer el líquido sobre la arena. Seguro termina arrepentido, pero bueno. No desea que el anciano tenga una mala opinión de él. Y hablando de opiniones…
–¿Qué le hace pensar que aceptare buscar a un desconocido, teniendo mis propios problemas?
–Por las ninfas, eres de verdad…
Franz, estás en muchos, muchos problemas.
-quien busca una persona. .. Puede encontrar a 2 ¿no cree?
–O tal vez no encuentre a ninguna solo por intentar encontrar a ambas. Nunca se sabe.
Era una lógica aún más aplastante, pero Franz no pensaba encontrar a una, así que en realidad no importa demasiado. Seguramente el hombre descubriese que él no es el más indicado para esos trabajos.
Traga un poco de saliva al notar el tridente. Es que eso cambia todo el doble. Hasta él sabe que eso solo lo lleva un rey de los mares, que el maestro tuvo la amabilidad de contarle leyendas de los mares y Franz está lo bastante maduro para reconocer que, en medio de tanta leyenda, hay una que otra verdad.
–Confiar en un extraño no parece algo propio de un rey, si me permite decirlo… ¿Quién es la persona por la que estaría dispuesto a correr el riesgo?
Sonríe al pensar en esa supuesta adicción. Que no, no era taaan adicto. Es solo para pasar las penas. Y cuando tenía alguna misión, se mantenía lejos de cualquier bebida alcohólica.
–La verdad, conociéndola, lo más seguro es que esté dentro de una botella. – dice, más para sí que para él. Brujas todas, esa más que ninguna. –Pero no se preocupe, su alteza, – ante estas palabras, hace una pequeña reverencia, más bien burlesca. –esta noche por ser especial he bebido más de la cuenta. Normalmente soy bastante más despierto.
Franz, para apoyar sus palabras de que aún no es un adicto, saca de entre su ropa la botella medio vacía, dejando caer el líquido sobre la arena. Seguro termina arrepentido, pero bueno. No desea que el anciano tenga una mala opinión de él. Y hablando de opiniones…
–¿Qué le hace pensar que aceptare buscar a un desconocido, teniendo mis propios problemas?
Re: audiencia con el rey de los mares
El rey triton asintió al notar a su interlocutor más atento, y incluso respondió con preguntas inteligentes.
-Soy el señor de los mares. .. Guardián de las profundidades... Y puedo ver mucho más allá de la superficie joven... Puedo ver tu bondad, pero también tus inseguridades... Tu pena... No eres alguien banal, aunque sospecho que eres alguien acostumbrado a las comodidades.
Estaba claro que no era un marinero, ni un pueblerino, su perspicacia y sus molades lo indicaban, un marinero lo invitaría a una botella y un pueblerino lo adoraria como un dios y pediría clemencia.
-La desaparecida es mi hija... Ariel..... No se si fue por su voluntad o no, hiso tratos con quien no debía.
Triton suspiro
-Que por que deberías? ... No tienes por que.... Yo no puedo abandonar el mar, soy su señor... Así que si tu no. Puedes. .. Y yo no puedo... Sólo puedo subir la marea, hasta encontrarla... Inundar toda la tierra si es nesesario, Triton ascendió su tridente y el oleaje empezó a ser más fuerte, a combertirse en una gran marea alta...
Triton no quería llegar a eso, por que eso lo enfrentaría con la bruja, y cuando la bruja aparecía perdía un ser muy querido.
-Pero tu no te sientas obligado... Son cosas que pasan, la tierra se inunda, los pueblos desaparecen... Pero no pasa nada.
-Soy el señor de los mares. .. Guardián de las profundidades... Y puedo ver mucho más allá de la superficie joven... Puedo ver tu bondad, pero también tus inseguridades... Tu pena... No eres alguien banal, aunque sospecho que eres alguien acostumbrado a las comodidades.
Estaba claro que no era un marinero, ni un pueblerino, su perspicacia y sus molades lo indicaban, un marinero lo invitaría a una botella y un pueblerino lo adoraria como un dios y pediría clemencia.
-La desaparecida es mi hija... Ariel..... No se si fue por su voluntad o no, hiso tratos con quien no debía.
Triton suspiro
-Que por que deberías? ... No tienes por que.... Yo no puedo abandonar el mar, soy su señor... Así que si tu no. Puedes. .. Y yo no puedo... Sólo puedo subir la marea, hasta encontrarla... Inundar toda la tierra si es nesesario, Triton ascendió su tridente y el oleaje empezó a ser más fuerte, a combertirse en una gran marea alta...
Triton no quería llegar a eso, por que eso lo enfrentaría con la bruja, y cuando la bruja aparecía perdía un ser muy querido.
-Pero tu no te sientas obligado... Son cosas que pasan, la tierra se inunda, los pueblos desaparecen... Pero no pasa nada.
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
–Estoy acostumbrado a la vida que me tocó, nada más. Cosas que pasan cuando naces siendo un príncipe.
No quiso pensar que el viejo rey podía leerlo como un libro abierto, eso era trabajo de su maestro. Además, ¿inseguridades? ¿Pena? ¿ÉL? Nah, se estaba equivocando de libro. Tenía que estar equivocándose. Eso sonaba más como Hanz. Sobre todo por la parte de las inseguridades.
Hijas. Las hijas normalmente se quedan junto a los padres hasta que estos les abren la puerta, por comodidad, gusto, tradición, etc. Seguramente este papi no era tan bueno, si se le escapaba la niña. Hasta la fecha el suyo mantenía bastante bien a su adorable hija, pero nunca se sabe. El rey de Lindert no era el mejor ejemplo de paternidad responsable.
–Pues las chicas no se van por nada, alteza… - dice, buscando no hacerlo enfadar. No quiere morir aun, menos ahogado. Tiene una chica esperando pacientemente su visita, para enterrar sus dedos en su cuello y sacarle las confesiones a la… ah, ¿en qué estaba? –Tal vez ella no desea que la busquen.
Es la mejor opción. Intentar convencerlo de que buscara en otro lado a su hijita, o con otra persona. Marshovia era grande, seguro un marino loco le hacía caso.
Y mierda, mierda y más mierda. El anciano es astuto y, además, está desesperado. Digo, para confiarle a un supuesto borracho semejante tarea, algo malo debe haber. Y amenazar de semejante forma la tierra firme… Franz, claro, no tiene nada que perder. Lindert está en medio de las altas montañas nevadas, dudaba que las aguas marinas llegasen allí. Pero… ¿Y Arendelle?
–Anna…
Señor, ¿por qué justo ahora tenía que acordarse de que tenía prometida? ¿Y que esa prometida no vive en la seguridad de las montañas? ¿Y que en el fondo la quiere?
Se da un golpe en el rostro, maldiciendo al anciano y su familia entre dientes. Madre incluida. Porque, hasta nuevo aviso, le haría caso. No quería morirse, no quería que ella se muriera. Fin de la discusión.
–Bien, bien, entiendo tu petición. – a la mierda con formalidades. –Pero, ¿Cómo se supone que encuentre a tu hija? Si no sé cómo es, o si está en este reino. Yo no puedo perder mi tiempo buscándola por todas las Tierras Encantadas, tengo mis prioridades.
No quiso pensar que el viejo rey podía leerlo como un libro abierto, eso era trabajo de su maestro. Además, ¿inseguridades? ¿Pena? ¿ÉL? Nah, se estaba equivocando de libro. Tenía que estar equivocándose. Eso sonaba más como Hanz. Sobre todo por la parte de las inseguridades.
Hijas. Las hijas normalmente se quedan junto a los padres hasta que estos les abren la puerta, por comodidad, gusto, tradición, etc. Seguramente este papi no era tan bueno, si se le escapaba la niña. Hasta la fecha el suyo mantenía bastante bien a su adorable hija, pero nunca se sabe. El rey de Lindert no era el mejor ejemplo de paternidad responsable.
–Pues las chicas no se van por nada, alteza… - dice, buscando no hacerlo enfadar. No quiere morir aun, menos ahogado. Tiene una chica esperando pacientemente su visita, para enterrar sus dedos en su cuello y sacarle las confesiones a la… ah, ¿en qué estaba? –Tal vez ella no desea que la busquen.
Es la mejor opción. Intentar convencerlo de que buscara en otro lado a su hijita, o con otra persona. Marshovia era grande, seguro un marino loco le hacía caso.
Y mierda, mierda y más mierda. El anciano es astuto y, además, está desesperado. Digo, para confiarle a un supuesto borracho semejante tarea, algo malo debe haber. Y amenazar de semejante forma la tierra firme… Franz, claro, no tiene nada que perder. Lindert está en medio de las altas montañas nevadas, dudaba que las aguas marinas llegasen allí. Pero… ¿Y Arendelle?
–Anna…
Señor, ¿por qué justo ahora tenía que acordarse de que tenía prometida? ¿Y que esa prometida no vive en la seguridad de las montañas? ¿Y que en el fondo la quiere?
Se da un golpe en el rostro, maldiciendo al anciano y su familia entre dientes. Madre incluida. Porque, hasta nuevo aviso, le haría caso. No quería morirse, no quería que ella se muriera. Fin de la discusión.
–Bien, bien, entiendo tu petición. – a la mierda con formalidades. –Pero, ¿Cómo se supone que encuentre a tu hija? Si no sé cómo es, o si está en este reino. Yo no puedo perder mi tiempo buscándola por todas las Tierras Encantadas, tengo mis prioridades.
Re: audiencia con el rey de los mares
- OFF:
- perdon por tardar, estaba creando la escena perfecta , y me llevo un poco mas de tiempo (ademas de que por un tiempo perdi lo que habia guardado para esta historia)
El rey Triton parecia algo encolerisado, la forma de dirigirse a el del humano le enfadaba, como si el pudiera considerarse de su mismo nivel.
-¡Es mi hija! ¡solo me preocupa! ¡Esta perdida en un mundo de humanos! sois seres agresivos y nada compasivos, no respetais ni al mar ni a la tierra... y si pudierais invadiriais hasta el cielo... a veces solo creo que es cuestion de tiempo que lo invadais todo...
luego alzo su tridente dispuesto a dar la orden final, aunque luego lo volvio a bajar mientras serio y muy decidido dijo sin pestañear, sin duda o pena en su corazon
-pero no lo dudes, simple humano, dedicare hasta mi ultimo suspiro a traerla de vuelta... no permitire que corrumpais a mi hija con vuestras estupidas ideas de libertad desmedida...no sabes a que peligros se esta enfrentando
(la bruja del tiempo no dudara en hacerme mas daño aun...)
El rey se detuvo de repente como si hubiera recibido un golpe invisible al oir las ultimas palabras de franz, parecia que por fin habia entrado en razon, al parecer esa dura mollera era capaz de entender que franz no tenia que dedicarse por completoa lo que Triton le diera en gana.
- tienes razon... no puedes hacer nada... perdoname, estoy muy preocupado por ella y me cuesta pensar con claridad
luego enfadado con alguienque no estaba dijo
-¡¿pero por que tiene que ser tan testaruda?!.... ¡¿no ve que es por su bien? por que se aleja si lo unico que quiero es protegerla... ¡mantenerla a salvo! es lo unico que quiero
Despues de la perdida de su madre, Triton temia perder todo aquello que tenia, auqello lo torturaba y lo transformaba en aquel hombre sobreprotector, que no dudaria en hundir la tierra.
A pesar de todo, se sentia tan impotente... con todo el poder de los mares en su mano, podia cambiar todo y a todos con un movimiento de su tridente, cambiando las corrientes podia convertir el mundo en un reino helado o hundirlo como a la Atlantida... y aun asi tan incapaz de poder hacer nada, no podia ni... espera.
habia algo en lo que no habia caido algo sospechoso, pero mas bien extraño, Triton no solia hacer preguntas personales a los extraños pero considero esta una exepcion.
-espera... eres un principe? ¿y este no es tu reino? ¿y que haces tu aqui solo?
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
Su discurso le pareció... curioso. Le sacó incluso una sonrisa, aunque sabía que la cosa iba en serio. Muy en serio.
-Lo dice el rey de la raza que come humanos, felicidades. Tu moral me sorprende... - ¿Qué ha dicho qué? ¿Él? Culpemos al alcohol, le soltó la lengua y le nubla el sentido común. -El mar también tiene sus riesgos, pero ya ves como muchos humanos entregan su vida para navegar en el... aunque seguramente tu hija vuelva pronto a casa. Seguramente se aburra de la vida por estos lados...
Y los hijos pródigos siempre vuelven a casa, tarde o temprano. Porque sin dudas la vida era más dura lejos de la protección paterna. No, no lo decía por experiencia propia. Aunque si le faltara su maestro, sin dudas no sabría que hacer.
Suspiró. Ahora venía la parte donde el rey iba de la etapa de furia ciega a la desesperanza. Como un borracho, más o menos. Franz... pues no tenía idea de cómo reaccionar con "borrachos y sus arranques emocionales". El que se hacía cargo de sus borracheras era Hanz.
-Disculpas aceptadas - musitó, confundido aun. -Tal vez se sienta ahogada, ¿no? Digo, yo cuando era más joven también me sentía así, aunque mi salida fue unirme al ejercito...
No se le pasó por la mente escapar. ¿Para qué? Si en el fondo, el castillo ese le gustaba. Ocultaba bastantes secretos entre sus frías paredes.
-espera... eres un principe? ¿y este no es tu reino? ¿y que haces tu aqui solo?
Anda, una pregunta inteligente...
-Sí, soy un príncipe. -dijo, como si fuera lo más obvio del mundo, aunque de seguro con esas pintas que llevaba no lo fuera. -Franz Ferdinand, heredero al trono de Lindert. -esto lo dijo con ese tono serio y pomposo que solían tener los nobles cuando lo anunciaban en el palacio. -Ese reino que queda a las faldas de la cordillera nevada esa... - y ahí se le fue lo serio. -Pues vine a este reino buscando a una vieja amiga - aunque amiga era una exageración. Lo suyo siempre fueron negocios y una que otra noche entre los matorrales. Pero eso el viejo no tenía que saberlo. -Recibí una carta de un amigo en común, que dice que ella tiene algo que me pertenece. Por desgracia, al parecer se la tragó la tierra, pues no he podido averiguar nada de ella ni su paradero nuevo. Así que terminé emborrachándome para pasar las penas y, pues, apareciste de la nada...
Y desde ahí nada tenía sentido... Incluso no tenía sentido que le contase tanto sobre su empresa, puesto que el viejo no le sería de utilidad, pero tomando en cuenta que él le contó su situación, le pareció sensato. Entre borrachos es normal contarse cuentos...
-Lo dice el rey de la raza que come humanos, felicidades. Tu moral me sorprende... - ¿Qué ha dicho qué? ¿Él? Culpemos al alcohol, le soltó la lengua y le nubla el sentido común. -El mar también tiene sus riesgos, pero ya ves como muchos humanos entregan su vida para navegar en el... aunque seguramente tu hija vuelva pronto a casa. Seguramente se aburra de la vida por estos lados...
Y los hijos pródigos siempre vuelven a casa, tarde o temprano. Porque sin dudas la vida era más dura lejos de la protección paterna. No, no lo decía por experiencia propia. Aunque si le faltara su maestro, sin dudas no sabría que hacer.
Suspiró. Ahora venía la parte donde el rey iba de la etapa de furia ciega a la desesperanza. Como un borracho, más o menos. Franz... pues no tenía idea de cómo reaccionar con "borrachos y sus arranques emocionales". El que se hacía cargo de sus borracheras era Hanz.
-Disculpas aceptadas - musitó, confundido aun. -Tal vez se sienta ahogada, ¿no? Digo, yo cuando era más joven también me sentía así, aunque mi salida fue unirme al ejercito...
No se le pasó por la mente escapar. ¿Para qué? Si en el fondo, el castillo ese le gustaba. Ocultaba bastantes secretos entre sus frías paredes.
-espera... eres un principe? ¿y este no es tu reino? ¿y que haces tu aqui solo?
Anda, una pregunta inteligente...
-Sí, soy un príncipe. -dijo, como si fuera lo más obvio del mundo, aunque de seguro con esas pintas que llevaba no lo fuera. -Franz Ferdinand, heredero al trono de Lindert. -esto lo dijo con ese tono serio y pomposo que solían tener los nobles cuando lo anunciaban en el palacio. -Ese reino que queda a las faldas de la cordillera nevada esa... - y ahí se le fue lo serio. -Pues vine a este reino buscando a una vieja amiga - aunque amiga era una exageración. Lo suyo siempre fueron negocios y una que otra noche entre los matorrales. Pero eso el viejo no tenía que saberlo. -Recibí una carta de un amigo en común, que dice que ella tiene algo que me pertenece. Por desgracia, al parecer se la tragó la tierra, pues no he podido averiguar nada de ella ni su paradero nuevo. Así que terminé emborrachándome para pasar las penas y, pues, apareciste de la nada...
Y desde ahí nada tenía sentido... Incluso no tenía sentido que le contase tanto sobre su empresa, puesto que el viejo no le sería de utilidad, pero tomando en cuenta que él le contó su situación, le pareció sensato. Entre borrachos es normal contarse cuentos...
Re: audiencia con el rey de los mares
El rey triton continuo escuchando sus palabras, algunas frutos del alcohol, pero no faltas de verdad, a sus palabras el Rey Triton simplemente respondio
-Puede que mi gente coma humanos... aunque personalmente vuestra carne no me desagrada, o eso creo, me parece una perdida de tiempo y energias ... dais tantos problemas como comida que como cuando estais vivos... muchos huesos y poca carne, no me vale la pena
No obstante añadio
-y aunque de buen grado lo prohibiria, no puedo negar a mi gente... la venganza que se merece.
No hizo mencion a su hija, aunque sabia que el joven tenia razon, pero eso no significaba que estuviera exentos de peligros.
El hablaba de que igualmente podia comprender a su hija ... ¡jovenes! creen que pueden hacer lo que quieran sin ver los peligros, y el principe era un ejemplo claro de esa verdad.
-¡¿y has venido solo?! sin escolta?! ¡¿has dejado a tu reino solo sin nadie al mando?! ¡como puedes ser tan irresponsable!
el no seria su hijo, ni seria de su misma raza, pero ya se habian contado demasiadas cosas para que no resultase raro que lo tuteara como si lo fuera.
-¡¿que dira tu pueblo cuando vean que el principe no esta?!
-Puede que mi gente coma humanos... aunque personalmente vuestra carne no me desagrada, o eso creo, me parece una perdida de tiempo y energias ... dais tantos problemas como comida que como cuando estais vivos... muchos huesos y poca carne, no me vale la pena
No obstante añadio
-y aunque de buen grado lo prohibiria, no puedo negar a mi gente... la venganza que se merece.
No hizo mencion a su hija, aunque sabia que el joven tenia razon, pero eso no significaba que estuviera exentos de peligros.
El hablaba de que igualmente podia comprender a su hija ... ¡jovenes! creen que pueden hacer lo que quieran sin ver los peligros, y el principe era un ejemplo claro de esa verdad.
-¡¿y has venido solo?! sin escolta?! ¡¿has dejado a tu reino solo sin nadie al mando?! ¡como puedes ser tan irresponsable!
el no seria su hijo, ni seria de su misma raza, pero ya se habian contado demasiadas cosas para que no resultase raro que lo tuteara como si lo fuera.
-¡¿que dira tu pueblo cuando vean que el principe no esta?!
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Rey Tritón
Re: audiencia con el rey de los mares
Prefirió dejar pasar el tema de venganzas y comida. Primero porque desde ese punto de vista, él era comestible, aunque de una forma similar a una ardilla. Segundo, porque estaba borracho y no deseaba comenzar a filosofar. Era humano, pero no estúpido o ciego. Seguro que los jabalíes que se comía también veían a los humanos como monstruos.
Lo que sí, no aceptó de buena gana que viniese a reclamarle sobre responsabilidad... ¡Lo más responsable que ha hecho es justamente dejar el reino!
-¡Claro que he venido solo! Este asunto debo tratarlo en persona, y no creo que la gitana esa acepte compañía extra. -no iba a conocer él lo testaruda que era. Seguramente le lanzaría una maldición. O un jarrón. ¿Por qué estaba pensando en un jamón? -Por lo demás, no soy necesario para asuntos de estado, para eso está mi padre. Para visitas sociales, mi madre. -lo de la reina era mentira descarada, pero Tritón no tenía por qué enterarse... -Admito que no soy el príncipe más responsable que ha tenido Lindert - y decía príncipe, porque si hablaban de heredero lejos ganaba su madre. -pero esta vez he pensado bastante bien mis acciones y no he dejado nada al azar. Todo está perfectamente controlado.
Guardó silencio ante lo el pueblo. Esa, y solo esa, era la parte torcida del tema. Su doble...
Miró a Tritón durante un minuto, sin saber qué hacer. ¿Le contaba? Realmente era una idea estúpida, cosa de borrachos, pero no le gustaba que lo creyera un bruto irresponsable sin cerebro.
-Mi pueblo verá al príncipe Franz quedarse unas semanas solo en la corte, tranquilamente. -no era mentira. El parecido entre Hanz y él era suficiente para que lo suplantara, mientras no estuviesen juntos. Ahí, esos pequeños detalles que los diferenciaban saltaban a la luz. -Es Hanz, un simple soldado de Lindert, quien se ha tomado unas pequeñas vacaciones para descansar de su última batalla.
Esperaba que comprendiese un poco de su plan, tal vez no los detalles, pero sí la parte importante.
-Hanz se ha quedado ocupando mi lugar, por si no has comprendido...
Y que lo quemen luego, ya lo dijo.
Lo que sí, no aceptó de buena gana que viniese a reclamarle sobre responsabilidad... ¡Lo más responsable que ha hecho es justamente dejar el reino!
-¡Claro que he venido solo! Este asunto debo tratarlo en persona, y no creo que la gitana esa acepte compañía extra. -no iba a conocer él lo testaruda que era. Seguramente le lanzaría una maldición. O un jarrón. ¿Por qué estaba pensando en un jamón? -Por lo demás, no soy necesario para asuntos de estado, para eso está mi padre. Para visitas sociales, mi madre. -lo de la reina era mentira descarada, pero Tritón no tenía por qué enterarse... -Admito que no soy el príncipe más responsable que ha tenido Lindert - y decía príncipe, porque si hablaban de heredero lejos ganaba su madre. -pero esta vez he pensado bastante bien mis acciones y no he dejado nada al azar. Todo está perfectamente controlado.
Guardó silencio ante lo el pueblo. Esa, y solo esa, era la parte torcida del tema. Su doble...
Miró a Tritón durante un minuto, sin saber qué hacer. ¿Le contaba? Realmente era una idea estúpida, cosa de borrachos, pero no le gustaba que lo creyera un bruto irresponsable sin cerebro.
-Mi pueblo verá al príncipe Franz quedarse unas semanas solo en la corte, tranquilamente. -no era mentira. El parecido entre Hanz y él era suficiente para que lo suplantara, mientras no estuviesen juntos. Ahí, esos pequeños detalles que los diferenciaban saltaban a la luz. -Es Hanz, un simple soldado de Lindert, quien se ha tomado unas pequeñas vacaciones para descansar de su última batalla.
Esperaba que comprendiese un poco de su plan, tal vez no los detalles, pero sí la parte importante.
-Hanz se ha quedado ocupando mi lugar, por si no has comprendido...
Y que lo quemen luego, ya lo dijo.
Re: audiencia con el rey de los mares
naturalmente Triton dejo que el ebrio principe hablara de mas, no tenia razones para detener su parloteo
-pero esta vez he pensado bastante bien mis acciones y no he dejado nada al azar. Todo está perfectamente controlado.
Triton nego levemente la cabeza, le recordaba a Ariel cuando decia que no habia peligros que el decia que lo tenia todo "controlado"
-Mi pueblo verá al príncipe Franz quedarse unas semanas solo en la corte, tranquilamente.
Al oir aquello triton fruncio nuevamente el ceño casi como enfadado, pero en realidad pensaba para si, que definitivamente el alcohol habia enturbiado la mente del joven.
-Es Hanz, un simple soldado de Lindert, quien se ha tomado unas pequeñas vacaciones para descansar de su última batalla.
Triton observo detenidamente al joven como si pensasa que decir o estuviera dandole vueltas a algo
(¿tendra que ver ese Hanz con lo que estabamos hablando?)
-Hanz se ha quedado ocupando mi lugar, por si no has comprendido...
Triton asintio levemente como si finalmente comprendiera, como habia dicho antes todos los humanos les parecian iguales.
-sin duda deberia parecerte mas a ti de lo normal, si no se darian cuenta.
Triton ladeo la cabeza como si intentara alejar el comentario que acababa de hacer.
-quiero decir... ¡es una idea irresponsable y inmadura! por tu...
Nuevamente se detuvo como si le diera vueltas a la cabeza mientras murmuraba en voz alta para si
-pero ciertamente hay asuntos importante a los que no hay que entrometer al reino, pero no por ello puedes obviarlos...
Luego finalmente argumento
-¡¿pero y si te pasa algo?! ¿crees que ese "Hanz" podra sustutuirte si te pasa algo?
Pero incluso antes de que le contextara se autorespondio, pero como si no lo hubiera preguntado a Franz sino a si mismo
-pero es un riesgo que debo asumir... no puedo abandonar mi reino, pero mucho menos a mi hija... y si me pasa algo mis hijas sabran lo que hay que hacer, con mas de 500 años ya son mayorcitas.
Pero ahora tenia un problema, el no tenia un "Hanz"... no tenia mas remedio que crearse uno.
-¡SEBASTIAN! ¡ven aqui!
de repente un cangrejo aparecio flotando, su aptitud era sumisa pero estaba claramente alterado
-MAJESTAD!!! ¡¿Que hace en la superficie?! no sabe que le pueden ...¡AH!
finalmente el cangrejo sirviente callo en la presencia humana de Franz y se escondio detras de su rey como buen servidor (?)
-Tranquilo Sebastian, esta ebrio... mañana no lo recordara o pensara que lo soño, ademas no creo que entienda lo que dices.
Cosa extraña que pesara eso, si en realidad habia pretendido endilgarle el trabajo de buscar a su hija a ese hombre borracho.
Sebastian mas tranquilo miro a su señor
-y... ¡¿por que esta aqui?! el resto de sus hijas estan preocupadas
-tranquilo ire enseguida, en cuanto me valla.
aquellas palabras confusas hicieron al cangrejo callarse usando su pequeño cerebro para el asunto en cuestion.
-¡¿como que se va?! no puede irse!
-por eso, no me voy a ir, mientras estoy buscando a mi hija
nuevamente el cangrejo se quedo "pescando" mientras Triton lanzo su tridente y las aguas los absorvieron en un torbellino... ¡a pie de costa!
una leve tormenta electrica asoto el cielo y el agua cuando dos figuras identicas emergieron.
No obstante la expresion en la cara de triton de sorpreza y confusion eran bastante llamativa para reconocer a Sebastian
-¡¿pero que ha hecho?!
-necesito alguien de confianza en el trono de la atlantida mientras busco a mi hija... tu me has servido fielmente durante años, no conozco nadie mejor para sustituirme
-¡pe... pero!
Antes de que Sebastian pensara algo mejr que decir el rey triton le puso la corona en la cabeza y le puso el tridente en mano.
Una leve luz rodeo a triton antes de que se lanzara a nadar a la costa... ¡nadando con piernas!
Triton finalmente dio sus primeros y tambaleantes pasos por la arena, algo ofuscado con esos extraños tentaculos que salian de lo que deberia ser una cola.
Por ello no parecia darse cuenta de que su potente y musculoso cuerpo estaba desnudo.
Pero cuando finalmente se mantuvo en pie y parecio mantenerse, antes de que pudiera dar un paso hacia la costa, se volvio como si escuchara alguien llemarle
-¡señor! que hago ¡no puedo hacerme apsar por usted!
Esta vez la voz humana si era entendible pero aunque el tono de voiz era igual, le faltaba el caracter del rey.
No obstante Triton ni miraba a Sebastian, ni su rostro aprecia serio como hasta ahora, su expresion hablaba mucho por el de los sentimeintos que lo envargaban al sentir la brisa marina y las mareas llamarlo de vuelta a su hogar.
no pudo mas que contextar a sebastian
-lo haras bien amigo... se que lo haras
-pero esta vez he pensado bastante bien mis acciones y no he dejado nada al azar. Todo está perfectamente controlado.
Triton nego levemente la cabeza, le recordaba a Ariel cuando decia que no habia peligros que el decia que lo tenia todo "controlado"
-Mi pueblo verá al príncipe Franz quedarse unas semanas solo en la corte, tranquilamente.
Al oir aquello triton fruncio nuevamente el ceño casi como enfadado, pero en realidad pensaba para si, que definitivamente el alcohol habia enturbiado la mente del joven.
-Es Hanz, un simple soldado de Lindert, quien se ha tomado unas pequeñas vacaciones para descansar de su última batalla.
Triton observo detenidamente al joven como si pensasa que decir o estuviera dandole vueltas a algo
(¿tendra que ver ese Hanz con lo que estabamos hablando?)
-Hanz se ha quedado ocupando mi lugar, por si no has comprendido...
Triton asintio levemente como si finalmente comprendiera, como habia dicho antes todos los humanos les parecian iguales.
-sin duda deberia parecerte mas a ti de lo normal, si no se darian cuenta.
Triton ladeo la cabeza como si intentara alejar el comentario que acababa de hacer.
-quiero decir... ¡es una idea irresponsable y inmadura! por tu...
Nuevamente se detuvo como si le diera vueltas a la cabeza mientras murmuraba en voz alta para si
-pero ciertamente hay asuntos importante a los que no hay que entrometer al reino, pero no por ello puedes obviarlos...
Luego finalmente argumento
-¡¿pero y si te pasa algo?! ¿crees que ese "Hanz" podra sustutuirte si te pasa algo?
Pero incluso antes de que le contextara se autorespondio, pero como si no lo hubiera preguntado a Franz sino a si mismo
-pero es un riesgo que debo asumir... no puedo abandonar mi reino, pero mucho menos a mi hija... y si me pasa algo mis hijas sabran lo que hay que hacer, con mas de 500 años ya son mayorcitas.
Pero ahora tenia un problema, el no tenia un "Hanz"... no tenia mas remedio que crearse uno.
-¡SEBASTIAN! ¡ven aqui!
de repente un cangrejo aparecio flotando, su aptitud era sumisa pero estaba claramente alterado
-MAJESTAD!!! ¡¿Que hace en la superficie?! no sabe que le pueden ...¡AH!
finalmente el cangrejo sirviente callo en la presencia humana de Franz y se escondio detras de su rey como buen servidor (?)
-Tranquilo Sebastian, esta ebrio... mañana no lo recordara o pensara que lo soño, ademas no creo que entienda lo que dices.
Cosa extraña que pesara eso, si en realidad habia pretendido endilgarle el trabajo de buscar a su hija a ese hombre borracho.
Sebastian mas tranquilo miro a su señor
-y... ¡¿por que esta aqui?! el resto de sus hijas estan preocupadas
-tranquilo ire enseguida, en cuanto me valla.
aquellas palabras confusas hicieron al cangrejo callarse usando su pequeño cerebro para el asunto en cuestion.
-¡¿como que se va?! no puede irse!
-por eso, no me voy a ir, mientras estoy buscando a mi hija
nuevamente el cangrejo se quedo "pescando" mientras Triton lanzo su tridente y las aguas los absorvieron en un torbellino... ¡a pie de costa!
una leve tormenta electrica asoto el cielo y el agua cuando dos figuras identicas emergieron.
No obstante la expresion en la cara de triton de sorpreza y confusion eran bastante llamativa para reconocer a Sebastian
-¡¿pero que ha hecho?!
-necesito alguien de confianza en el trono de la atlantida mientras busco a mi hija... tu me has servido fielmente durante años, no conozco nadie mejor para sustituirme
-¡pe... pero!
Antes de que Sebastian pensara algo mejr que decir el rey triton le puso la corona en la cabeza y le puso el tridente en mano.
Una leve luz rodeo a triton antes de que se lanzara a nadar a la costa... ¡nadando con piernas!
Triton finalmente dio sus primeros y tambaleantes pasos por la arena, algo ofuscado con esos extraños tentaculos que salian de lo que deberia ser una cola.
Por ello no parecia darse cuenta de que su potente y musculoso cuerpo estaba desnudo.
Pero cuando finalmente se mantuvo en pie y parecio mantenerse, antes de que pudiera dar un paso hacia la costa, se volvio como si escuchara alguien llemarle
-¡señor! que hago ¡no puedo hacerme apsar por usted!
Esta vez la voz humana si era entendible pero aunque el tono de voiz era igual, le faltaba el caracter del rey.
No obstante Triton ni miraba a Sebastian, ni su rostro aprecia serio como hasta ahora, su expresion hablaba mucho por el de los sentimeintos que lo envargaban al sentir la brisa marina y las mareas llamarlo de vuelta a su hogar.
no pudo mas que contextar a sebastian
-lo haras bien amigo... se que lo haras
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